Ahorrar es bueno, eso todos lo sabemos, pero aunque parezca una cosa tan sencilla, no todos pueden hacerlo porque no cuentan con una estrategia para llevarlo a cabo y eso termina frustrando a la mayoría de la gente que termina abandonando esta misión antes de siquiera empezar.
S.M.A.R.T. Es un acrónimo de la palabra en inglés que sirve ara describir una técnica empleada sobre todo en las organizaciones para alcanzar objetivos por personas, áreas y empresas, pero que desde hace ya tiempo, también se emplea para finanzas y específicamente para ahorrar.
Cuando se trata de ahorrar, lo mejor será poner objetivos, es decir, no basta con decir que dejaremos algunos pesos en la cuenta antes de que termine la quincena, se trata de tener un goal a largo plazo y conseguirlo con pequeñas metas, ejemplo, supongamos que se quiere juntar en un año, doce mil pesos, entonces, el plan está claro, se deben de juntar mil pesos cada mes para lograr esa meta proyectada a doce meses.
El segundo rasgo de la metodología Smart, es que sea medible (measurable) esto quiere decir a grandes rasgos que debe de generar resultados visibles. Si volvemos al ejemplo de ahorro anual de doce mil pesos, será muy fácil analizar, medir y constatar los resultados si después de tres meses tienes tres mil pesos en tus ahorros.
Mucha gente para llevar control de sus finanzas, echan mano de un documento excel o bien de una app, si te es más fácil hacerlo de este modo, no desestimes apoyarte en una de éstas.
Toda estrategia de ahorro debe de ser alcanzable; cuando los objetivos son desmesurados o no están acorde a la realidad, llega la frustración. Si tienes un ingreso de ocho mil pesos al mes, no puedes fijarte ahorros de cinco mil, porque eso implicaría que debes guardarte setenta por ciento de tu salario; es decir, podrías, pero es muy temerario.
Ponte en mente ahorrar acorde a tu ingreso después de analizar todos tus gastos.
Los resultados positivos son la garantía de que se van dando las cosas según lo planificado. Si cada mes estás prescindiendo de ciertos gastos para llegar a tu ahorro, pero después de algunos meses comienzas a ver que tus tácticas y estrategias te están funcionando, entonces allí tienes la respuesta de que estás haciendo lo correcto para alcanzar tus metas financieras.
Tus planes de ahorro planteados necesitan tener un tiempo de concreción, es decir, no necesitas poner fecha y hora en un calendario de cuándo llegarás a tu meta, pero si está claramente especificada, trata de que se cumpla. Aquí retomamos nuevamente el ejemplo de los doce mil pesos en doce meses. ¿Fácil, no?